La aldea de Kashengenek, ubicada en la provincia de Alto Katanga de la República Democrática del Congo, ha recibido recientemente un regalo notable de Kambov Mining, una empresa conjunta entre CNMC y Gécamines SA. Esta generosa contribución consiste en una escuela nueva, llamada Escuela Kashengeneck, y un proyecto integral de agua que ha transformado la vida de los aldeanos.
El proyecto, que comenzó en octubre de 2023, se completó después de casi cinco meses de esfuerzos dedicados por parte de Kambov Mining. La Escuela Kashengeneck ahora cuenta con seis aulas completamente equipadas con sillas, un edificio administrativo con oficinas y salas de conferencias, y comodidades esenciales como baños y pozos de agua. La escuela incluso cuenta con un sistema de filtración de agua, paneles solares y tanques de agua para satisfacer las necesidades de agua de toda la aldea.
La finalización de estos dos proyectos no solo ha proporcionado mejores instalaciones educativas para los estudiantes y maestros, sino que también ha aliviado las dificultades que enfrentaban los aldeanos para acceder a agua limpia. Con el establecimiento de pozos públicos y un sistema de suministro de agua confiable, los aldeanos ya no tienen que viajar largas distancias para satisfacer sus necesidades básicas de agua. Esta nueva comodidad ha mejorado significativamente su calidad de vida.
La ceremonia de entrega de la Escuela Kashengeneck contó con la presencia de John Muloba Kitonge, Ministro de Finanzas de Alto Katanga, quien elogió la alta calidad del campus y los pozos públicos. Elogió a Kambov Mining por no solo brindar oportunidades de empleo a la comunidad, sino también por cumplir de manera encomiable sus responsabilidades sociales. Esta colaboración ha fomentado una relación armoniosa entre la empresa y la comunidad, contribuyendo a una situación beneficiosa para todos.
Como empresa responsable, Kambov Mining siempre ha priorizado la cooperación y el desarrollo mutuamente beneficioso. Este esfuerzo está en línea con su compromiso con la construcción de la iniciativa «la Franja y la Ruta» y su dedicación a cumplir con sus responsabilidades sociales. La finalización de estos proyectos significa la profunda amistad entre China y la República Democrática del Congo y sirve como un testimonio poderoso del impacto positivo que se puede lograr a través de la cooperación internacional.
Este proyecto transformador es un faro de esperanza para el pueblo de Kashengenek. La Escuela Kashengeneck y las fuentes de agua mejoradas han traído un futuro más brillante para los aldeanos, permitiendo a más niños recibir educación y a toda la comunidad disfrutar de una mejor calidad de vida. Es un verdadero testimonio del poder de la colaboración y del impacto que las iniciativas socialmente responsables pueden tener en las comunidades necesitadas.